Los
atletas sufren de distintas molestias físicas después de carreras o entrenamientos muy exigentes. Pero a veces estos dolores pueden significar una futura lesión. Mirá en esta nota ante qué síntomas debés estar alerta.
Dolor en las articulaciones: Vigilá especialmente las articulaciones de la rodilla, tobillos, codos y hombros. Si el dolor dura más de 48 horas consultá con tu médico. Este dolor generalmente está relacionado con un traumatismo en los huesos y cartílagos.
Inflamación: generalmente es sinónimo de dolor, enrojecimiento y calor. La hinchazón causa dolor y rigidez. Puede tratarse de lesiones como esguinces o torceduras. Para bajar la inflamación aplicá hielo en la zona afectada y reposá por unos días. Si continúa, consultá a tu médico.
Entumecimiento y hormigueo: Nunca los ignores. Estas sensaciones suelen estar relacionados con la compresión del nervio, y estas señales de advertencia pueden indicar un daño grave que si o si debe ser diagnosticado por un médico.
QUÉ HACER CUANDO APARECE EL DOLOR:
- Detené la actividad de inmediato.
- Envolvé la articulación lesionada con una venda de compresión.
- Aplicá hielo a la parte lesionada unas tres veces al día.
- Levantá la zona lesionada para reducir la hinchazón.
- Consultá con tu médico para que diagnostique la lesión.
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